Ácidos Grasos

Los Ácidos Grasos, ingredientes necesarios para la salud.

Presentamos a ustedes un proyecto de investigación en salud humana desarrollado en México. Los resultados de ciencia básica obtenidos en este proyecto se han aprovechado para el diseño de suplementos alimenticios destinados a prevenir o coadyuvar en el tratamiento de padecimientos crónico degenerativos que han afectado al hombre.

¿Qué son los ácidos grasos?

Los ácidos grasos son grasas de alta calidad que se integran a la envoltura de cada una de nuestras células dándoles permeabilidad selectiva. Debido a esta permeabilidad de la membrana celular pueden ingresar a cada célula los nutrientes que la mantienen con vida y permite expulsar los desechos producto de su metabolismo. Células adecuadamente nutridas y limpias son aptas para cumplir sus funciones, integran órganos eficientes y otorgan una mejor calidad de vida al ser humano. Las células son los tabiques de que está integrado nuestro edificio físico. Un edificio es tan fuerte como la calidad de sus componentes; células funcionales nos hacen más preparados para enfrentar las distintas enfermedades y disfrutar de una vida prolongada. Se les conoce como ácidos grasos esenciales y deben ser ingeridos o usados desde la etapa de gestación hasta el último instante en la vida de cualquier individuo. Su ingesta es tan necesaria como lo es el consumo de vitaminas, proteínas o minerales.

Los ácidos grasos integran la bicapa lipídica de la membrana de cada célula. El estado adecuado de las células y el intercambio de nutrientes, oxígeno y la expulsión de productos de desecho dependerán del correcto aporte de esta variedad de grasas poliinsaturadas al organismo. La membrana celular sólo puede ser atravesada por cierto tipo de moléculas por difusión simple mientras que otras moléculas solo pueden cruzar por medio de transportes especializados conocidos como receptores de membrana. Una membrana celular deficiente da lugar a una muerte prematura de la célula por falta de nutrientes y acumulación de toxinas. La importancia de la membrana celular se acentúa si tomamos en cuenta que es el 75% del total de la célula.

La columna vertebral de esta investigación son los ácidos grasos y derivados autacoides de origen vegetal. Hemos centrado la atención en los ácidos grasos por el papel tan importante que juegan en la vida de la célula y en la salud humana.

El papel de los ácidos grasos en la salud se determinó por primera vez suprimiéndolos en la alimentación de animales de laboratorio. Las consecuencias fueron, entre otras, la pérdida de pelo y escamamiento de la piel. Al restablecerles los ácidos grasos en su alimentación hubo una recuperación y desaparición de estos efectos negativos.

Cuando hay carencia de ácidos grasos poliinsaturados en la dieta, el organismo emplea grasas saturadas que carecen de la funcionalidad requerida, dificultando la expulsión de residuos de las células, con su consecuente envenenamiento y el desaprovechamiento de los nutrientes alimenticios que se ven entorpecidos de ingresar a las mismas. Una célula intoxicada y mal nutrida dista mucho de ser funcional con lo que hay desequilibrios en nuestro funcionamiento orgánico.

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¿Para qué sirven los ácidos grasos en nuestro organismo?

Ciertos ácidos grasos se llaman esenciales porque nuestro cuerpo es incapaz de producirlos y sólo mediante la alimentación podemos adquirirlos.

• alizar varios procesos metabólicos del organismo, empezando por la reconstrucción y producción de nuevas células. A diario miles de nuestras células mueren y otras tantas las reemplazan. De allí la diaria necesidad de ácidos grasos en nuestra nutrición.

• Son precursores de otros procesos y sustancias por lo que al ingerirlos activan mecanismos en nuestro organismo que ayudan a recuperar el equilibrio funcional que es condición indispensable de salud. Son precursores de hormonas y ácidos grasos insaturados con cadenas más largas, por ejemplo las Prostaglandinas, muy importantes para el funcionamiento de las células del cerebro y las células nerviosas y en las funciones de regulación del organismo. Como nuestro cerebro está compuesto principalmente de ácidos grasos, pueden actuar en casos de demencia senil o Alzheimer.

• Son los componentes que liberan la mayor cantidad de energía durante la oxidación de los lípidos.

• Son útiles para la prevención de enfermedades cardiacas, la regulación de la presión sanguínea, la moderación de la función de las plaquetas y el fortalecimiento del sistema inmunológico. Tienen un papel fundamental en la prevención y control de diversas condiciones como coagulopatías y procesos hipertensivos. Los ácidos grasos esenciales omega-6 intervienen en la actividad celular relacionada con riesgos coronarios, disminuyendo niveles de colesterol en la sangre al favorecer la adecuada actividad de la célula.

• Estudios desarrollados han demostrado que estos nutrimentos son clave fundamental para el desarrollo óptimo de un feto y el fortalecimiento del útero. El alimento fundamental de un feto son ácidos grasos y a través de la leche materna la madre proporciona ácidos grasos. La talla de un recién nacido de madre alimentada con ácidos grasos es más óptima.

• La influencia de los ácidos grasos en el desarrollo de las neuronas y la vista se debe a que los ácidos grasos esenciales son los constituyentes más importantes del cerebro y la retina ocular.

• Al mantener en condicion

• Son necesarios para rees adecuadas a nuestras células prolongan la vida de las mismas lo que ayuda a retardar el envejecimiento, al retardar el recambio celular.

En conclusión un organismo requiere de ácidos grasos para cumplir funciones importantes del ciclo de vida. Al ser esenciales los ácidos grasos para la fisiología del organismo se hace evidente el por qué la deficiencia de estos puede jugar un rol importante en enfermedades del corazón, hipertensión, diabetes, artritis reumatoide así como varios desórdenes visuales y cutáneos.

Devolver funcionalidad al organismo.

El organismo humano está diseñado genéticamente para vivir en equilibrio y tener una existencia sana durante décadas; la maravilla más grande en la medicina no es ningún medicamento sino el cuerpo humano que es mucho más que la maquinaria o computadora más perfecta, que nos permite nacer, desarrollarnos y morir. La condición a cumplir para un adecuado ciclo de vida es proporcionar un adecuado mantenimiento a través de una correcta nutrición.

Principios filosóficos

• El cuerpo del hombre está diseñado genéticamente para autorregularse, vivir en equilibrio y hacer frente a las distintas enfermedades. El cuerpo humano es el más importante médico que poseemos.

• Algunos de los desordenes que aparecen en la salud también son mecanismos de defensa del organismo para restablecer el equilibrio perdido. Una diarrea es una defensa, como lo es una fiebre o la elevación del colesterol o triglicéridos.

• Cuando por medios distintos a la naturaleza atendemos los síntomas de una disfunción sin atender sus causas estamos actuando parcialmente en la búsqueda de la salud. Atender una fiebre sin atender sus causas es atender efectos sin corregir las orígenes, lo mismo que una diabetes que solo es tratada con hipoglucemiantes. En ambos casos solo se esta dejando avanzar la enfermedad y con el tiempo el deterioro celular se transformará en un problema crónico.

• Hay que vivir en consonancia con la naturaleza. Cuando violamos los principios de la naturaleza abrimos la posibilidad de un número importante de consecuencias adversas.

• La fuente de la salud es una adecuada nutrición. Los desequilibrios en nuestra alimentación son la puerta de entrada a muchas enfermedades. Dar el mantenimiento a nuestro organismo por medio de alimentación adecuada es prevenir condiciones patológicas que originan deterioro crónico de difícil control.

• En casos de enfermedad es importante el empleo de fármacos de cualquier origen, natural o sintético, más aún cuando corre algún riesgo la vida de un individuo. Sin embargo este empleo de medicamentos es, en esencia, una manipulación de nuestro organismo. Si un diabético tiene elevada su glucosa una opción es darle un hipoglucemiante. Si sus niveles de glucosa bajan más allá de los parámetros regulares, entonces la opción contraria es proporcionársela.

• La propuesta de nuestro programa es proporcionar elementos altamente activos que reactiven a nuestro organismo mediante la reestructuración celular buscando devolverle la funcionalidad para que él sea el que regule, de la manera más perfecta que existe, sus múltiples parámetros. Cualquier enfermedad puede depender de antibióticos o fármacos toda la vida a menos de que nos preocupemos por fortalecer las defensas del individuo.Complementariedad de medicamentos y nutrientes.Los fármacos tienen un mecanismo de acción muy definido en nuestro organismo. Actúan siguiendo rutas bioquímicas bien determinadas. Un hipoglucemiante hará bajar la glucosa tanto de un diabético como de una persona que no tenga dicha enfermedad. Es por esto que el manejo de medicamentos debe hacerse con mucho cuidado y está restringido a los profesionales de la salud; cualquier persona debe evitar la automedicación. Uno de los peligros en el uso sin supervisión médica de hipoglucemiantes, por seguir con el ejemplo, consiste en que se pueden bajar los niveles de glucosa que lleguen a poner en riesgo la vida de un paciente.Por otro lado, si utilizamos ciertos nutrientes en consonancia con nuestra naturaleza estos actuarán fortaleciendo nuestra capacidad funcional y autorreguladora, con lo cual se activan los mecanismos maravillosos que tiene el cuerpo humano para conservar su homeostasis. Es por eso que, sin negar el uso de fármacos y más bien en combinación con ellos, consideramos que la labor fundamental en bien de la salud es devolverle la funcionalidad a nuestro organismo. La búsqueda de la salud se inicia manteniendo en óptimas condiciones a cada una de nuestras células y esto se logra, en parte, al mantener en condiciones adecuadas a la membrana celular. Además de los nutrientes que ingerimos importa la manera en que nuestro cuerpo los puede aprovechar. Células sanas significan órganos sanos y órganos sanos significan salud a largo plazo.Diferencia entre ácidos grasos de origen vegetal y animal.

Las fuentes de ácidos grasos son vegetales, (linaza, soya, ajonjolí, pino) o animales (atún, salmón, bacalao). Los ácidos grasos de origen vegetal son de cadena corta mientras que los ácidos grasos de origen animal son de cadena larga. En este proyecto se han investigado ambas fuentes pero se ha preferido la fuente de origen vegetal por su mayor biocompatibilidad, menores efectos de sensibilidad y mayor ductilidad en el trabajo de laboratorio. Los ácidos grasos desarrollados en este proyecto han sido modificados para proporcionar ácidos grasos de cadena larga que es como los aprovecha nuestro organismo. El sentido de esta modificación es que los ácidos grasos en su forma original deben ser metabolizados por el hígado para ponerlos funcionalmente disponibles. Pero en algunos casos esta acción no es posible llevarla a cabo por inmadurez del hígado, vejez o algún padecimiento. Sin embargo ácidos grasos modificados y biodisponibles actúan desde el momento en que entran en contacto con alguna parte del organismo.

Características técnicas de los productos.

Este proyecto integra un desarrollo tecnológico ligado a investigación de ciencia básica que nos permite obtener productos que van más allá de la simple extracción y envasado de ácidos grasos. El trabajo realizado comprende la depuración de elementos tóxicos y nocivos para la salud humana, modificarlos para conformarlos de acuerdo a las necesidades del ser humano y mantenerlos estables durante largo tiempo. Entre otras los productos tienen las siguientes características.

Formulaciones Atóxicas. Una de las propiedades que se han estudiado profundamente es el de la inocuidad de estos productos. En consecuencia podemos afirmar que su consumo es seguro incluso con cantidades más allá de la toma sugerida. Una persona puede tomar 1,500 ml o más sin tener problemas, aunque un aprovechamiento adecuado sea suficiente con 80 ml por día como máximo. Son ácidos grasos emulsionados. Su consistencia es acuosa y aunque son aceites difieren de una consistencia oleosa por estar emulsionados.

Son hidrosolubles. Como es fácil probarlo, nuestras emulsiones puestas en agua logran una dispersión homogénea sin necesidad de agitarlo.

Son liposolubles. De igual manera, en un medio graso la dispersión de nuestra emulsión es homogénea. Desde el punto de vista de su acción en la membrana celular es más relevante el aspecto de liposolubidad ya que así se logra penetrar la bicapa lipídica para hacer una reconformación de la misma y reestructurar los receptores de membrana.

Su vehículo es un coloide para lograr una dispersión uniforme de macromoléculas.

Vehículo alcalino.

Su alcalinidad es superior a 10, sin tener consecuencias cáusticas. Su poder oxido reductor es superior a los -500 mv. Vehículos de emulsión con diferentes propiedades. Siendo la columna vertebral de nuestro proyecto ácidos grasos con diferente conformación de cadena larga y habiéndole dado una alta biocompatibilidad los vehículos tienen la función de controlar la velocidad de absorción para actuar con diversos impactos. Altamente biocompatibles. Una de las muestras de su alta biocompatibilidad es su rápida absorción que experimentamos al colocarlo en nuestra piel al ver cómo rápidamente se absorbe.

Estabilidad.

Los ácidos grasos en forma original son altamente inestables. Un efecto de esta inestabilidad es que se arrancian o se arrancian los alimentos que los contienen. La finalidad de este proyecto ha sido investigar sobre un vehículo que nos permita conservar ácidos grasos con todas sus propiedades durante periodos prolongados de tiempo.

Empleo del ácido “paraaraquidónico”.

El ácido graso omega – 6 tiene un efecto proinflamatorio. Sin embargo el ácido araquidónico tiene importantes funciones como precursor de prostaglandinas. Nuestros productos contienen un omega – 6 modificado para actúe competitivamente con el ácido araquidónico, obteniendo así las ventajas respectivas y eliminando los efectos proinflamatorios de éste ácido.

Tiene una acción bactericida sin ser un antibiótico. La situación depende de su alcalinidad ya que las bacterias sucumben en un ambiente adverso para ellas como lo es un pH superior a 8 mismo que es inofensivo para el ser humano.

Estas características permiten tener efectos beneficiosos en un suplemento alimenticio debido a que se hace una integración extremadamente rápida a la membrana de las células, devolviéndoles su permeabilidad adecuada.

De esta manera se activa un proceso de limpieza de las células al tiempo que se permite su nutrición. Células libres de toxinas y nutridas son células que trabajan adecuadamente. Células funcionales permiten tener órganos en condiciones adecuadas y órganos que cumplan sus funciones permiten tener individuos sanos.

Estas conclusiones sobre los ácidos grasos son las mismas que comparten los institutos y universidades más importantes en todo el mundo.

El que los ácidos grasos en forma natural sean altamente inestables y se oxidan o arrancian muy rápido es una de las razones por las cuales en las grandes ciudades tenemos carencia de ellos ya que difícilmente los alimentos que están a disposición son lo adecuadamente frescos. De allí la importancia de contar con productos que proporcionen ácidos grasos estables por largos periodos de tiempo, depurados de sustancias que pueden resultar tóxicas y en tomas prácticas sin tener que consumir grandes cantidades de alimentos para obtener las porciones ajustadas a nuestros requerimientos.

La idea de devolver la funcionalidad a nuestro organismo es perfectamente compatible con diferentes terapias.

El uso de estos productos combinado con medicamentos, por ejemplo, aporta el terreno fértil a dichas substancias constituido por células funcionales y con receptores de membrana adecuados lo que se traduce en una potenciación de los mismos. Lo mismo ocurre con el empleo de diferentes las diferentes terapias que se han desarrollado en el terreno de la medicina.

Ventajas Competitivas.

Este programa de investigación tiene sus raíces al final de la década de 1980 con investigaciones sobre los efectos en heridas de una solución compuesta de aceites de origen vegetal. A mediados de la década de los noventa se integró un programa de investigación sobre la atoxicidad de los ácidos grasos en ingesta por vía oral. A partir de este momento se ha conducido una investigación seria que ha dado como resultado una variedad de productos. Algunas de las razones científico técnicas que nos permitimos poner en consideración son los siguientes:

o Este es un programa desarrollado con investigaciones muy rigurosas y actualmente se continúa el proceso de fundamentación y diseño de nuevas aplicaciones.

o El programa de salud y los resultados obtenidos con estos productos se han realizado con la participación y supervisión de médicos.

o Los ácidos grasos han sido modificados logrando una mayor biocompatibilidad sin alterar su naturaleza y sin utilizar agregados químicos.

o Los ácidos grasos poliinsaturados y elongados no requieren la intervención del hígado para darles la biodisponibilidad requerida. Así es como podemos actuar incluso en enfermedades hepáticas.

o La parte tecnológica del proyecto lo constituye el vehículo que es un coloide. Debido a sus propiedades podemos lograr una dispersión uniforme de macromoléculas.

o El mecanismo de acción es específico: la recomposición de la membrana celular. La biodisponibilidad y un excelente vehículo dan como resultado productos que pueden ser evaluados con los criterios médicos científicos más estrictos.

o El programa de investigación y desarrollo sigue proyectando productos tecnológicamente interesantes. Estos desarrollos tecnológicos tienen como idea rectora el respeto a las leyes de la naturaleza y al individuo que quiere conservar o recuperar su salud. Si la célula es la unidad fundamental de la vida, su protección es cuidar la vida.

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